martes, 15 de septiembre de 2015

COMIDA CALIENTE

Te levantas como cada mañana, te duchas, te vistes y te vas al trabajo. Es un día como otro cualquiera, hay tráfico, el cielo está nublado y llegas justito al trabajo.

En un momento tonto, te paras a pensar. ¿Qué tenía hoy de comer? ¿Hago una pizza?

Decides mandarle un mensaje a tu pareja.

- “Cari, ¿qué te apetece comer hoy?”

...no contesta…

Bueno, son solo las 12 de la mañana, ya te contestará.

PITICLIN

PITICLIN

- “Lo que tu quieras” “Te recuerdo que invitastes a mis padres a comer en casa hoy” - ves en el móvil.

¿Y qué haces ahora de comer? Mmmm….puede ser que tengas unas pechugas de pollo y nata...bueno, habrá que apañarse con eso.

Llegas a casa corriendo (es la 13:30), sacas la cebolla, empiezas a cortarla. La pones en la sartén ya caliente al fuego.

- Cari, ¿a qué hora vienen a comer? - le preguntas a tu pareja por teléfono.

- A las dos en punto como dijiste. Me recogen ellos en coche, así que llegaré a las 2. ¿Te apañas bien o quieres que intente llegar antes?

- Si, no te preocupes.

¡Se ha quemado la cebolla! ¡Y no tienes más! Bueno, la nata lo arregla seguro.

Metes todo en la cocinera y lo programas... 25 minutos... en modo guiso. Listo.

…esperas…

....sigues esperando...

Y suena el timbre, están aquí y la cocinera no ha terminado.

Abres la cocinera corriendo...

  ...

....un olor a quemado te abofetea la cara...

No hay comentarios:

Publicar un comentario